Última actualización: 9 de mayo de 2025
En el mundo de la inversión en bolsa, dos filosofías destacan por encima del resto: la inversión en acciones value (valor) y la inversión en acciones growth (crecimiento). Ambas estrategias tienen defensores acérrimos y, a lo largo de la historia, cada una ha tenido sus momentos de gloria dominando los mercados financieros. Pero, ¿qué diferencia realmente a estas dos aproximaciones? ¿Cuál es más rentable a largo plazo? ¿Y cuál se adapta mejor a tu perfil como inversor?
En este artículo analizaremos en profundidad las características, ventajas e inconvenientes de las acciones value y growth para ayudarte a tomar decisiones de inversión más informadas y alineadas con tus objetivos financieros.
¿Qué son las acciones value?
La inversión value se basa en la premisa de comprar compañías infravaloradas por el mercado; es decir, empresas cuyo precio actual en bolsa está por debajo de su valor intrínseco real. El término fue popularizado por Benjamin Graham, considerado el padre de la inversión en valor y mentor de Warren Buffett, posiblemente el inversor value más conocido de todos los tiempos.
Características principales de las acciones value:
- Infravaloración: Cotizan a precios bajos en relación con sus fundamentales (beneficios, activos, etc.).
- Ratios atractivos: Suelen presentar bajos PER (Precio/Beneficio), altos dividend yield y bajo P/BV (Precio/Valor en libros).
- Empresas establecidas: Normalmente son negocios maduros, estables y con trayectorias previsibles.
- Dividendos: Tienden a pagar dividendos consistentes a sus accionistas.
- Sectores tradicionales: Frecuentemente pertenecen a sectores como financiero, industrial, energético o consumo básico.
La premisa fundamental de la inversión value es que el mercado tiende a sobrerreaccionar ante noticias negativas, deprimiendo temporalmente el precio de algunas acciones por debajo de su valor real. Los inversores value aprovechan estas ineficiencias para comprar a precios descontados y esperar a que el mercado reconozca eventualmente su valor real.
Algunas empresas que tradicionalmente se han considerado value son Berkshire Hathaway, JPMorgan Chase, Coca-Cola o Procter & Gamble. La mayoría son compañías con décadas de historia, modelos de negocio probados y flujos de caja estables.
Si quieres comenzar a invertir en bolsa con un capital limitado, te recomendamos leer nuestro artículo sobre cómo invertir 1000 euros para sacar el máximo partido a tu dinero.
¿Qué son las acciones growth?
En contraste, la inversión growth se centra en empresas con potencial de crecimiento superior a la media del mercado. Estas compañías reinvierten gran parte de sus beneficios (si los tienen) en desarrollar nuevos productos, expandirse a nuevos mercados o mejorar su propuesta de valor para ganar cuota de mercado rápidamente.
Características principales de las acciones growth:
- Alto potencial de crecimiento: Empresas con tasas de crecimiento de ingresos o beneficios muy superiores a la media del mercado.
- Valoraciones elevadas: Suelen cotizar a múltiplos altos (PER elevados) porque el mercado anticipa su crecimiento futuro.
- Reinversión vs. dividendos: Tienden a reinvertir sus beneficios en lugar de repartir dividendos.
- Innovación: Frecuentemente están involucradas en nuevas tecnologías o modelos de negocio disruptivos.
- Sectores emergentes: Predominan en tecnología, biotecnología, energías renovables o comercio electrónico.
Los inversores growth están dispuestos a pagar primas sustanciales por empresas que muestran crecimientos excepcionales, apostando por que ese crecimiento se mantendrá en el tiempo y eventualmente justificará las valoraciones actuales.
Ejemplos típicos de acciones growth son compañías como Amazon, Tesla, Nvidia, o empresas más pequeñas pero innovadoras en sectores como software, biotecnología o energías alternativas como el hidrógeno verde.
Value vs Growth: Diferencias fundamentales
Para entender mejor estas dos filosofías, podemos compararlas en varios aspectos clave:
1. Horizonte temporal
- Value: Generalmente de largo plazo, con inversores pacientes que esperan que el mercado reconozca el valor real de la empresa.
- Growth: Puede ser de medio a largo plazo, aunque tiende a ser más dinámico y con más rotación de cartera.
2. Rentabilidad
- Value: Combina potencial de revalorización (cuando el mercado corrige la infravaloración) con ingresos por dividendos.
- Growth: Se centra principalmente en la revalorización del precio de las acciones, con menos énfasis en los dividendos.
3. Volatilidad y riesgo
- Value: Suele presentar menor volatilidad y puede ofrecer cierta protección en mercados bajistas gracias a su valoración ya descontada.
- Growth: Típicamente más volátil, con mayores correcciones en períodos de incertidumbre o cuando los resultados no cumplen las expectativas.
4. Métricas de valoración
- Value: Se analizan ratios como PER, P/BV, dividend yield, flujo de caja libre o valor empresa/EBITDA.
- Growth: Se priorizan métricas como crecimiento de ingresos, expansión de márgenes, PEG (PER/tasa de crecimiento) o métricas específicas del sector.
Si te interesa entender mejor cómo tributar los rendimientos de tus inversiones, te recomendamos nuestro artículo sobre cuánto se paga a Hacienda por beneficios en bolsa.
Rendimiento histórico: Value vs Growth
A lo largo de la historia, value y growth se han alternado en períodos de dominancia. Aunque tradicionalmente se consideraba que value ofrecía mejores rentabilidades ajustadas al riesgo a largo plazo (como demostraron estudios de Fama y French), la última década (2010-2020) ha sido claramente dominada por el estilo growth, impulsado por el auge tecnológico.
Factores que influyen en el ciclo value/growth:
- Tipos de interés: Los bajos tipos suelen favorecer a las acciones growth, ya que reducen el coste de oportunidad de esperar beneficios futuros.
- Ciclo económico: Las value suelen comportarse mejor en períodos de recuperación económica, mientras que las growth pueden destacar en fases expansivas maduras.
- Innovación tecnológica: Períodos de rápido cambio tecnológico tienden a favorecer a las growth.
- Cambios regulatorios: Pueden afectar diferencialmente a sectores tradicionalmente value o growth.
Es importante entender que ninguna estrategia es superior en todos los contextos. Los ciclos se alternan, y lo que funciona en una década puede quedar rezagado en la siguiente. La clave para muchos inversores exitosos es entender cuándo el péndulo puede estar cambiando de dirección.
Para diversificar tus inversiones más allá de la bolsa, puedes considerar otras alternativas como el crowdfunding o la inversión inmobiliaria en España.
¿Qué estilo se adapta mejor a tu perfil?
La elección entre value y growth debería alinearse con tu perfil como inversor:
Considera invertir en value si:
- Tienes un horizonte temporal largo (5+ años)
- Prefieres empresas con modelos de negocio probados
- Valoras la generación de ingresos recurrentes vía dividendos
- Te consideras un inversor paciente que puede mantener posiciones durante períodos prolongados
- Tienes aversión al riesgo y prefieres menor volatilidad
- Crees en la importancia del margen de seguridad en tus inversiones
Considera invertir en growth si:
- Estás dispuesto a asumir mayor volatilidad a cambio de potenciales rendimientos superiores
- Te interesan sectores innovadores y empresas disruptivas
- No dependes de los dividendos como fuente de ingresos
- Puedes tolerar períodos de rendimientos negativos
- Tienes interés y capacidad para analizar tendencias tecnológicas y de consumo
- Disfrutas siguiendo empresas en rápida evolución
Muchos inversores experimentados optan por una aproximación híbrida, combinando elementos de ambas filosofías para construir carteras más robustas.
Si estás empezando a invertir, te recomendamos explorar las mejores apps para invertir en bolsa y encontrar el mejor banco para invertir en España según tus necesidades.
Estrategias para invertir en acciones value
Si te inclinas por la inversión en valor, aquí tienes algunas estrategias efectivas:
1. Análisis fundamental profundo
La inversión value requiere un análisis riguroso de los estados financieros. Debes examinar:
- Balance: Evaluar la solidez financiera, nivel de endeudamiento y calidad de activos.
- Cuenta de resultados: Analizar tendencias de ingresos, márgenes y beneficios.
- Estado de flujos de efectivo: Comprobar la capacidad de generar caja operativa.
2. Búsqueda de catalizadores
Identifica posibles eventos que podrían desencadenar una revalorización:
- Cambios en la gestión
- Reestructuraciones corporativas
- Desinversiones de activos no estratégicos
- Cambios regulatorios favorables
- Mejoras operativas en marcha
3. Inversión contraria
Sé valiente cuando otros tienen miedo:
- Busca sectores temporalmente impopulares
- Analiza empresas afectadas por problemas temporales pero con fundamentales sólidos
- Mantén una visión a largo plazo y no te dejes influir por el sentimiento del mercado a corto plazo
4. Margen de seguridad
Siempre invierte con un margen de seguridad, comprando significativamente por debajo de tu estimación del valor intrínseco para protegerte contra errores de análisis o cambios imprevistos.
Para maximizar tus rendimientos a largo plazo, te recomendamos aprender sobre el interés compuesto y cómo puede multiplicar tus inversiones.
Estrategias para invertir en acciones growth
Si te orientas hacia la inversión en crecimiento, considera estas estrategias:
1. Análisis de tendencias sectoriales
Identifica sectores con viento de cola a largo plazo:
- Digitalización y transformación digital
- Envejecimiento poblacional
- Sostenibilidad y energías limpias
- Biotecnología y salud personalizada
- Nuevos hábitos de consumo
2. Evaluación de ventajas competitivas
Busca empresas con barreras de entrada significativas:
- Propiedad intelectual valiosa
- Efectos de red
- Economías de escala
- Datos propietarios
- Costes de cambio elevados para los clientes
3. Seguimiento de métricas específicas
Monitoriza los KPIs relevantes para cada tipo de negocio:
- Tasa de crecimiento de ingresos
- Expansión de márgenes
- Adquisición y retención de clientes
- Gasto en I+D como porcentaje de ventas
- Penetración de mercado
4. Diversificación dentro del enfoque growth
No concentres todo tu capital en pocas empresas:
- Combina empresas growth establecidas con otras más pequeñas y disruptivas
- Diversifica entre sectores growth distintos
- Considera diferentes etapas de madurez empresarial
Si buscas diversificar geográficamente, puedes explorar cómo invertir en el S&P 500 desde España para acceder al mercado estadounidense.
El auge de las estrategias híbridas: GARP
Entre los enfoques pure value y pure growth, ha ganado popularidad la estrategia GARP (Growth At Reasonable Price), que busca empresas con características de crecimiento pero a valoraciones razonables.
Características de la estrategia GARP:
- Busca empresas con crecimiento superior a la media (aunque no necesariamente extraordinario)
- Pone énfasis en la calidad y sostenibilidad del crecimiento
- Presta atención a la valoración para no pagar precios excesivos
- Utiliza métricas como el PEG (PER/tasa de crecimiento) para identificar oportunidades
- Evalúa la calidad de la gestión y la asignación de capital
Esta aproximación híbrida resulta atractiva para inversores que quieren capturar parte del potencial de crecimiento sin asumir las valoraciones extremas de muchas growth puras.
Para inversores más conservadores, las Letras del Tesoro pueden ser una alternativa interesante como complemento a una cartera de acciones.
La importancia del análisis fiscal
Independientemente del estilo de inversión que elijas, el impacto fiscal puede ser significativo en tus rendimientos netos. Las estrategias value, al generar mayores dividendos, pueden tener implicaciones fiscales distintas a las growth.
Es importante conocer:
- La tributación de los fondos de inversión y las acciones en tu país.
- Las diferencias fiscales entre dividendos y ganancias de capital.
- Las posibles ventajas de vehículos como los fondos de inversión o ETFs.
- El impacto del horizonte temporal en la fiscalidad de tus inversiones.
- Cómo optimizar tu cartera para minimizar el impacto fiscal manteniendo tu estrategia.
Conocer la fiscalidad también implica entender conceptos como el ISR (Impuesto Sobre la Renta) y cómo afecta a tus inversiones.
Tendencias actuales en el debate Value vs Growth
En los últimos años, hemos presenciado varios desarrollos interesantes en este debate:
- El auge de las empresas «low-quality growth»: Empresas con altos crecimientos pero sin beneficios claros a corto plazo, que han tenido comportamientos extremadamente volátiles.
- La transformación digital de empresas value tradicionales: Compañías de sectores maduros que están adoptando tecnologías para mejorar eficiencia y encontrar nuevas fuentes de crecimiento.
- El impacto de la inflación y las subidas de tipos: Estos factores han comenzado a favorecer a sectores tradicionalmente value tras una década de dominio growth.
- La evolución de los criterios ESG: Tanto empresas value como growth están incorporando criterios medioambientales, sociales y de gobernanza, creando nuevas oportunidades y riesgos.
- El papel creciente de la Inteligencia Artificial: La IA está transformando sectores enteros, creando nuevas categorías de ganadores y perdedores que transcienden la división value/growth tradicional.
Si estás interesado en invertir en empresas innovadoras, puedes explorar las oportunidades para invertir en startups españolas como alternativa a la bolsa tradicional.
Construcción de cartera: Combinando Value y Growth
Para muchos inversores, la mejor estrategia es combinar elementos de value y growth en su cartera. Algunas aproximaciones prácticas son:
1. Asignación estratégica
Determina un porcentaje fijo para cada estilo basándose en:
- Tu horizonte temporal
- Necesidades de ingresos
- Tolerancia al riesgo
- Visión sobre los ciclos económicos
2. Asignación táctica
Ajusta el peso de cada estilo según:
- Valoraciones relativas entre ambos estilos
- Fase del ciclo económico
- Entorno de tipos de interés
- Rotaciones sectoriales en marcha
3. Construcción por bloques
Divide tu cartera en componentes funcionales:
- Bloque de ingresos (mayoritariamente value)
- Bloque de crecimiento (empresas growth de calidad)
- Bloque de oportunidades (situaciones especiales que pueden incluir tanto value como growth)
4. Diversificación internacional
Incorpora criterios geográficos en tu asignación:
- Mercados desarrollados (suelen tener más oportunidades value)
- Mercados emergentes (suelen ofrecer mayor potencial de crecimiento)
Si quieres maximizar tus oportunidades con poco capital, no te pierdas nuestro artículo sobre poca inversión, mucha ganancia.
Errores comunes en la inversión Value y Growth
Tanto si eres inversor value como growth, evita estos errores habituales:
Errores en inversión Value:
- Trampa de valor: Confundir empresas baratas con empresas de calidad a buen precio.
- Aferrarse a perdedores: Mantener posiciones en empresas con problemas estructurales no temporales.
- Ignorar cambios disruptivos: No reconocer cuando un sector está en declive permanente.
- Impaciencia: No dar tiempo suficiente para que se materialice la tesis de inversión.
Errores en inversión Growth:
- Pagar cualquier precio: Ignorar completamente la valoración por muy prometedora que sea la empresa.
- Confundir moda con tendencia: Invertir en burbujas sectoriales temporales.
- Sobreestimar el crecimiento: Proyectar tasas de crecimiento pasadas indefinidamente hacia el futuro.
- Ignorar la competencia: No valorar adecuadamente la entrada de nuevos competidores en mercados atractivos.
Para evitar sorpresas negativas con tus inversiones, conviene conocer conceptos como las retrocesiones y cómo pueden afectar a la rentabilidad de tus productos financieros.
Conclusión: ¿Value o Growth? Depende de ti
No existe una respuesta única sobre qué estilo es mejor, ya que depende de:
- Tu perfil como inversor: Objetivos, horizonte temporal, tolerancia al riesgo y conocimientos.
- El entorno macroeconómico: Tipos de interés, inflación, crecimiento económico y política monetaria.
- Las valoraciones relativas: La atracción de cada estilo varía según sus valoraciones en cada momento.
- Tu capacidad de análisis: Cada estilo requiere habilidades analíticas diferentes.
La historia muestra que ambos estilos tienen sus momentos de gloria y que la disciplina en la aplicación de cualquiera de ellos es más importante que la elección misma. Muchos inversores exitosos han combinado elementos de ambos, adaptándose a las condiciones cambiantes del mercado sin perder de vista sus principios fundamentales.
Para construir una cartera equilibrada y diversificada, considera incluir tanto acciones value como growth, ajustando los pesos según tu situación personal y el contexto de mercado. Y recuerda: la inversión es un viaje largo, no una carrera de velocidad.
Si quieres seguir aprendiendo sobre el mundo de la inversión, te recomendamos nuestro artículo sobre la fijación del precio del oro y cómo este activo puede complementar tu cartera de inversiones.
Preguntas frecuentes sobre Value vs Growth
¿Cuál es la diferencia principal entre acciones value y growth?
Las acciones value son empresas que cotizan a precios bajos en relación con sus fundamentales (beneficios, activos, etc.), mientras que las growth son compañías con altas tasas de crecimiento por las que los inversores están dispuestos a pagar valoraciones más elevadas.
¿Cuál estrategia ha sido históricamente más rentable?
A largo plazo, las estrategias value históricamente han mostrado mejores rentabilidades ajustadas al riesgo, pero en las últimas décadas, especialmente en los 2010s, las growth han dominado claramente los rendimientos.
¿Pueden combinarse ambas estrategias?
Sí, muchos inversores exitosos utilizan un enfoque híbrido, combinando empresas value de calidad con growth selectivas, o aplicando estrategias GARP (Growth At Reasonable Price).
¿Cómo afectan los tipos de interés a estas estrategias?
Los tipos de interés bajos tienden a favorecer a las acciones growth, ya que reducen la tasa de descuento aplicada a sus beneficios futuros. Por el contrario, entornos de tipos altos suelen beneficiar relativamente más a las value.
¿Qué índices siguen estas estrategias?
Existen índices específicos como el Russell 1000 Value y Russell 1000 Growth en EE.UU., o el MSCI Europe Value y MSCI Europe Growth en Europa, que siguen estas filosofías de inversión.
¿Qué estilo es más adecuado para inversores principiantes?
No hay una respuesta única, pero muchos asesores financieros recomiendan a los principiantes comenzar con una combinación equilibrada de ambos estilos, quizás a través de ETFs o fondos indexados, para ir desarrollando su propia filosofía con el tiempo.